Los Días Santos en aquella Mérida de 1950

Por Gabriel Zapata Bello

Cualquiera pensaría que en una ciudad de apenas 142 mil 858 habitantes, habrían pocas opciones de entretenimiento. (1)

Y pensaríamos que sería mucho más tediosa si nos refiriéramos a la  Mérida de cuando transcurrían los Días Santos de mitad del siglo XX pasado; para ser más precisos, a la Semana Santa de abril de 1950 .

Además de los misas, homilías y derroteros de visitas a las iglesias, los habitantes de Mérida tenían una amplia cartelera de opciones de entretenimiento y diversión en las fechas de Semana Santa de ese entonces.

El Diario del Sureste, -poco habituado a la información religiosa y confesional - consignaba en sus páginas de esos días interesantes eventos y espectáculos que se efectuaban en la entonces tranquila capital meridana .

En el famoso embudo de Santiago -el Circo Teatro Yucateco-se vivía desde semanas atrás la ebullición de la primera gran temporada de Lucha Libre en nuestro estado, organizada y promovida por el “empresario caballero” Don Carlos J. Casares Martínez de Arredondo, que había traído desde el altiplano una caravana de luchadores encabezados por el Sheik Maralá, el Cavernario Rangel, Bobby Texas, Silver Fox, Indio de Bacatete y el Gorila Castillo.

Aquel Viernes Santo, el 7 de abril, se efectuó la Primera Gran Batalla Campal en el Circo Teatro Yucateco, en la cual los pancracistas se dieron  todos contra todos, en una batalla que hizo crujir de verdad el tablado del cuadrilátero de Santiago, para emoción de los niños y familias que asistieron .(2)

Al término de la función, el empresario caballero confirmaba a la audiencia que en 2 semanas haría su debut en este encordado un novel luchador que prometía y vendría a ganarse el gusto del público aficionado yucateco : el demonio azul , Blue Demon.

El Sábado de Gloria se anunciaba con toda expectación la apertura del “Nuevo Cine Cantarell” -el mismo ubicado en la calle 60-que había sido inaugurado en 1936, pero que ahora anunciaba con bombo y platillo el estreno de su nueva pantalla con tecnología cicloramic que permitiría a los espectadores tener una visión ya no plana , si no panorámica de la película .(3)

El film inaugural del “Nuevo Cantarell” se trató de una comedia romántica americana protagonizada por el galán Cary Grant haciendo pareja con Betsy Drake, bajo el título de En busca de marido  (Every girl should be married), un título aparentemente poco propio para los Días Santos, pero que en realidad era la típica comedia acaramelada, en la cual la protagonista utilizaba inocentes artimañas para cazar a su galán, confirmando en su mensaje la consigna poco feminista de los años cincuenta : el fin último de toda mujer debía ser el matrimonio a cualquier costa .

El Domingo de Ramos se habían instalado unas carpas circenses en los terrenos posteriores de la Casa del Pueblo, donde iniciaría su temporada el Circo Arriola, de gran tradición en España, fundado en 1906, que hacía su recorrido en el Continente con sus prestigiadas funciones de trapecistas , payasos y domadores de feroces leones africanos . (4)

Los días Santos de 1950 en Mérida culminaban con un nostálgico pero emotivo evento peloteril.

Después de 30 años de ausencia en su tierra, retornaba a Yucatan , -vía desembarco en el puerto de Progreso- el mejor beisbolista yucateco de todos los tiempos y uno de los primeros huéspedes del Salon de La Fama del Beisbol Mexicano: el inmortal lanzador Julio Molina El diamante blanco.(5)

Acusando cierta disminución de sus facultades físicas y cognitivas, Molina no tuvo reparo en saludar de mano a las multitudes -2 mil personas-que lo recibieron en el Puerto de Progreso, así como a aquellas que le prodigaron nutridos aplausos en un homenaje en el Estadio Salvador Alvarado, acompañado de los viejos aficionados que atestiguaron décadas atrás las filigranas que bordó desde los diversos montículos del béisbol yucateco y peninsular.

Un par de años después , en 1952, el brillante lanzador yucateco fallecería en la Colonia Yucatán cercana a Tizimín, ingresando a la inmortalidad deportiva .

Para los amantes de la fiesta brava, se anunciaba para el siguiente Domingo de Pascua, en la Plaza de Toros Merida, una corrida de rejones abriendo el cartel el caballista y rejoneador Juan Cañedo, alternando con Alfonso Ramírez Calesero, “Amo de la elegancia” y Gregorio Garcia, “ídolo de Yucatan”, lidiando 6 toros de Palomeque.(6)

La amplia cartelera de eventos y espectáculos para aquella Mérida en Semana Santa daba cuenta de la calidad de vida de ese entonces , en la cual bastaba a sus habitantes el  caminar unas cuantas calles de distancia para recorrer las diversas parroquias y expiar sus pecados, o bien para gozar de espectáculos familiares y recrearse abiertamente.

Era una Mérida diferente ,nada tediosa y muy entretenida, en plena Semana Santa de hace 74 años.

Notas :

1. Séptimo Censo Nacional de Población 1950. Fuente INEGI
2. Lucha Libre Primera Batalla Campal, Diario del Sureste 5 abril 1950, p7.
3. Nuevo Cine Cantarell, Diario del Sureste, 8 de abril de 1950 p6.
   
4. Gran Circo Español “Arriola”, Diario del Sureste 10 abril 1950, p.6
   
5. Julio Molina 30 años después, Diario de Yucatán 10 de abril de 1950 p10.
   
6. Plaza de Toros Mérida Corrida de Pascua, Diario del Sureste 13 de abril de 1950 p6